Boda en Nerja
Ya os he contado alguna vez que una buena parte de mi infancia transcurrió en Nerja y que para mi es un lugar muy especial al que siempre me gusta volver. Por eso asistir a la boda de la hija de unos amigos allí me ha resultado la mejor manera de rematar el verano. La boda fue muy bonita, emotiva y cerca del mar pero a pesar de haber ejercercido de paparazzi sin problemas siento que las fotos de ese día son de los novios y no mías. No obstante os dejo unas pinceladas muy especiales: el velo de la novia hecho por su madre, la mejor tarta que recuerdo haber probado en años y el "me gusta" que enarbolamos todos los invitados.